El
hombrecillo perfecto
Se
despertó el hombre perfecto.
Era una
mañana perfecta.
Su
mujer perfecta
dormía
un sueño perfecto.
Se dio un baño perfecto
en la
ducha perfecta.
Se
vistió con su ropa perfecta
y tomó un desayuno perfecto.
Hizo
andar su automóvil perfecto
y
partió a su trabajo perfecto.
En el
viaje imperfecto
muchos hoyos
imperfectos;
mucha
gente imperfecta
manejaba
vehículos imperfectos.
Llegó a
su oficina perfecta
y
realizó su trabajo perfecto.
Llamó a
sus empleados imperfectos
y les
dio un discurso perfecto.
Les
pagó un sueldo imperfecto
y los
mandó a un trabajo perfecto.
Terminó
su labor perfecta
y regresó
a su hogar perfecto.
Lo
recibió su mujer perfecta
con un
beso pluscuamperfecto.
El
hombrecillo perfecto
se
sirvió una cena perfecta.
Vio las
noticias imperfectas
y se
acostó en su cama perfecta.
Dio las
buenas noches perfectas
y
partió a sus sueños perfectos.
Su
mujer perfecta
pensaba
en su hombre perfecto:
mañana
será otro día perfecto;
con mi
amante imperfecto
pasaremos
otro día imperfecto
y otro
día imperfecto
y otro
día imperfecto,
gracias
a mi hombre perfecto.